En un documento de 24 páginas, el juez federal del Distrito Sur de Nueva York Paul Crotty nego la solicitud de los dos sobrinos de la primera dama de Venezuela Cilia Flores, los primos Efraín Campos y Francisco Flores para eliminar sus confesiones que hicieron poco después de su arresto en Haití y las grabaciones en audio, video y fotos tomadas por la DEA, en las que entregan un paquete de cocaína y hablan de cómo hacerlo llegar a Estados Unidos, incurriendo en el delito de narcotráfico.
El testimonio en el juicio de una forma segura y creíble del agente especial Sandalio González en la manera que leyó las formas Miranda en español a cada uno de los acusados y la respuesta de ellos que indicó que entendía y firmaron, incuyendo cuando el acusado Campo Flores comentó al preguntarle si entendía la forma y él dijo que era un abogado, indicó el juez Crotty en su decisión por escrito.
La decisión fue dada conocer el miércoles por la fiscalía, el caso parecía haberse debilitado tras una audiencia el mes pasado en el que la defensa puso en entredicho las confesiones de sus clientes afirmando que fueron hechas bajo coerción y cuestionó la credibilidad de los dos principales informantes confidenciales de la investigación.
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