Los restos de los ocho turistas mexicanos fallecidos en el ataque militar aereo del pasado día 13 de septiembre salieron de El Cairo el lunes para arribar a la Ciudad de México en un esfuerzo del gobierno mexicano, para dar sepultura en suelo azteca, confirmó la cancillería de México hoy en un breve comunicado.
Los ocho turistas mexicanos y cuatro acompañantes egipcios murieron cuando según el testimonio de supervivientes un avión y helicópteros de las fuerzas de seguridad egipcias bombardearon sus vehículos en el desierto occidental, donde habian parado para almorzar durante una excursión.
Seis de los turistas mexicanos heridos ya fueron repatriados el jueves y se recuperan, en estado estable pero delicado, en un hospital de la capital Mexicana.
El gobierno egipcio no ha dado muchos detalles sobre este ataque a civiles Méxicanos que difrutaban de un viaje de turismo solo se limitó a asegurar que sus militares mataron por error a los turistas ya que se encontraban en una zona prohibida mientras estaban realizando un operativo contra yihadistas.
El gobierno y los familiares de los mexicanos asesinados por error de los militares egipcios esperan ver la investigación profunda y transparente que el miércoles, el ministro egipcio de Relaciones Exteriores, Sameh Chukry, prometió, aunque la pero la fiscalía general prohibió a los medios de comunicación publicar cualquier información vinculada con los hechos o a la investigación.
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