Parr quien se encontraba al lado de Reagan el 30 de marzo de 1981 cuando un joven, John Hinckley Jr., disparó al presidente en las puertas del hotel Washington Hilton, en la capital estadounidense, lo llevó hacia la limusina oficial, a prueba de balas, ordenó que la limusina no se dirigiese a la Casa Blanca sino al hospital más cercano, donde le confirmaron su miedo, que el mandatario había recibido un impacto de bala en el pecho y tenía una hemorragia interna.
Ese episodio marcó la vida de Parr, elogiado por sus compañeros y por la elite política del país por su rapidez, su sangre fría y su determinación en un momento de caos.
Nacido en 1930 en Montgomery Alabama, Jerry S. Parr creció en Florida y su primer trabajo fue en una compañía eléctrica, en 1962 se sumó al Servicio Secreto, donde también trabajó en la protección de los presidentes Gerald Ford en los años 1974-1977 y Jimmy Carter en esta etapa de servicio 1977-1981.
Después de retirarse del Servicio Secreto en 1985, obtuvo un máster en orientación pastoral y se convirtió en pastor de una iglesia ecuménica de Washington, es padre de tres hijos y abuelo de cuatro nietos.
La esposa del agente, Carolyn Parr, dijo a la prensa, que su esposo falleció este viernes en la capital estadounidense por una insuficiencia cardíaca.
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