El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó que ciertamente posible que hubiera una bomba en el avión ruso que cayó el pasado fin de semana en la península del Sinaí, en Egipto, con 224 personas a bordo.
Tomamos muy en serio eso la posibilidad, subrayó el presidente norteamericano, mientras Rusia prefiere la esperar los resultados de la investigación, si un artefacto explosivo derribó la nave, Estados Unidos tratará de investigar exactamente" qué y quien provocó el siniestro, dijó Obama.
Según fuentes de la inteligencia estadounidense citadas en las últimas horas por varias cadenas televisivas del país, el avión ruso que cayó con 224 personas a bordo en la península del Sinaí pudo haber sido objeto de un atentado del Estado Islámico (EI) o algún grupo yihadista vinculado a él.
La causas del siniestro aún se desconoce, pero la rama egipcia del Estado Islámico, Wilayat Sina, asegura haber derribado el avión, aunque no ha ofrecido detalles sobre cómo perpetró el ataque, no que no lo hace veridico.
Mientras que el Reino Unido ha suspendido todos los vuelos, Irlanda y Holanda, y compañías como Air France y Lufthansa, también han tomado medidas para evitar los vuelos sobre la península del Sinaí, Estados Unidos no ha anunciado ninguna medida y un portavoz de la Casa Blanca detalló que el Gobierno está revisando si se debe tomar alguna medida específica para reforzar la seguridad de los vuelos comerciales que llegan a EEUU desde ciertos países.
Obama Foto cortesia de Google Imagen
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