Michael Boyce, residente en el condado de Orange en Florida, fue arrestado y acusado de asesinato en primer grado por la muerte de un disparo con arma de fuego a su mujer Alexis Boyce, ella se encontraba embarazada de mellizos, recibio el disparó en la cabeza, el cual le causó la muerte, dijo la policía, sólo uno de los mellizos sobrevivió el crimen y se encuentra en estado crítico en el Winnie Palmer Hospital.
Los padres de la mujer oyeron los disparos y llamaron de inmediato al Servicio Emergencia 911.
Michael Boyce dijo a la policía que había sido su mujer quien se había disparado en la cabeza, pero posteriormente cambio sus declaraciones, declarandose culpable.
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